EL origen del feminismo

Hoy vemos con asombro como algunas mujeres salen a la calle a destruir monumentos, quebrar cristales y una serie más de fechorías con una rabia inaudita y la pregunta obligada es ¿Cuándo empezó esto?

El inicio del feminismo violento se puede ubicar en la publicación del libro “El segundo sexo” de Simone de Beauvoir donde establece como premisa principal que “No se nace mujer se llega a serlo» en el libro se lanza a un ataque frontal contra el papel de la mujer en la sociedad, se inventa un patriarcado dominador, se victimiza a la mujer y se desarrolla una ideología de redención.

La vida de Simone nos explica mucho su libro, Simone era amante de Sartre, de los amigos y amigas de Sartre y de sus alumnas, por cierto, fue expulsada de su puesto de maestra en la universidad por perversión de menores, sus amoríos con sus alumnas han quedado registrado en varios libros, por ella misma y sus alumnas.

Evidentemente, su conducta era reprobada por la mayor parte de la sociedad de aquellos tiempos y ella respondía con un rechazo total a la configuración de la sociedad.

Pero vayamos a las ideas, “No se nace mujer se llega a serlo” evidentemente habría que ver que entendía como mujer, si por mujer entendemos como “ama de casa” luego es cierto, no se nace como ama de casa, la sociedad las educaba para ser amas de casa y esto se extiende al concepto de esposa y madre, no así al aspecto sexual que se tiene desde la concepción hasta la muerte y aún después de la muerte las características de la mujer permanecen en los restos de ella.

Pero ¿entonces es cierto que el patriarcado esclavizó a la mujer en su rol en la sociedad? Esta afirmación de Simone es una distorsión dolosa de la historia, veamos porqué, la conducta del hombre está en gran parte regida por sus instintos y el más fuerte es el instinto de conservación que incluye la reproducción y la conservación de la vida.

Desde los primeros años de la vida del hombre se dio cuenta que no podía enfrentar solo los peligros de su contorno y se agrupó para defenderse y progresar, el nivel mas elemental de agrupación fue la familia y la primera asignación de roles fue que la mujer cuidaría el interior de la familia y el hombre el exterior, la mujer cuidaría a los hijos y el hombre buscaría en el exterior el alimento de la familia.

Y no había en esto una discriminación a la mujer, por el contrario, siendo la mujer más débil debía estar en el lugar más seguro y de igual forma los hijos que requerían de cuidados especiales desde el nacimiento, esto es de sentido común y lo puede entender hasta un idiota pero no lo entienden las personas ideologizadas que ponen todas su frustraciones en una lucha demencial contra lo natural.

Los roles requerían de diferentes aptitudes. El exterior era duro, competitivo amenazante y el hombre debía ser fuerte para defender a la familia de la cual se le hacía responsable y con la responsabilidad venía la autoridad, porque no se puede ejercer una responsabilidad sin autoridad, en cambio los hijos requerían de atención y cuidados amorosos, para lo cual había que fomentar la dulzura y el amor en la mujer así como la abnegación porque el servir y cuidar a los hijos requiere sacrificio, olvidarse a veces de uno mismo por ellos y la abnegación no solo era de la madre, el hombre tenía que renunciar a muchas cosas personales para trabajar en el sostenimiento de la familia.

Esto no lo podía entender una mujer depravada como Simona que solo buscaba el placer por el placer a cualquier costo y aprovecha su manejo de la palabra para distorsionar todo, esto es, crear un mundo donde sus perversiones fueran la norma y la sociedad de su tiempo la contra norma, lo obsoleto.

Transforma la autoridad del padre en dictadura y la abnegación de la madre en esclavitud crea la victima y el victimario y se pone como la heroína que ha redimir a las mujeres de su esclavitud.

EL libro hubiera pasado como los exabruptos de una ramera si no es que cae en las manos de un millonario sin escrúpulos que ve en el libro un filón de oro, “si la mujer sale a trabajar tendremos más oferta de mano de obra y subirán las utilidades”

Rockefeller también era un político influyente y convenció al gobierno que al duplicar la mano de obra los impuestos se duplicarían, así que se empezaron a regalar millones de libros y a patrocinar conferencistas en todo el mundo, así que Simona pasó de meretriz de segunda a filósofa influyente.

La narrativa de esta “revolución” era la misma de las últimas revoluciones, el enemigo a vencer era el patriarcado, el machismo, el hombre, la víctima la mujer y los héroes los políticos feministas con fondos públicos y de fundaciones que se dedicaron a predicar la nueva doctrina cada vez mas fuerte y absurda, con leyes injustas y dogmas ridículos que destruyen la pareja y la familia.

El feminismo no se ha quedado con Chona ha avanzado en aberraciones inauditas de las que hablaremos la próxima semana.